Una Ley General de Seguridad Privada: Urgencia para un México más seguro
La creciente inseguridad en México ha convertido al sector de la seguridad privada en un complemento esencial de las fuerzas públicas. Sin embargo, el marco regulatorio actual, compuesto por una Ley Federal desactualizada, 32 leyes estatales y cientos de reglamentos municipales, ha derivado en un esquema fragmentado que obstaculiza su funcionamiento y fomenta la corrupción.
En este contexto, es imperativo establecer una Ley General de Seguridad Privada que brinde orden y profesionalización al sector. Un marco normativo homogéneo eliminaría las más de 500 contradicciones legales que actualmente dificultan la operación de las empresas y garantizaría mejores condiciones laborales para sus trabajadores, además de servicios más confiables y eficientes para los usuarios.
La reforma que sigue en espera
En mayo de 2021, el Congreso fue facultado para expedir esta ley tras una reforma constitucional. Aunque el plazo venció en noviembre de ese mismo año, hasta la fecha no se ha concretado su promulgación.
Según Armando Zúñiga Salinas, presidente de ASUME y consejero de Coparmex Nacional, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana ha avanzado en un proyecto que podría ser aprobado próximamente bajo la dirección de Omar García Harfuch. Este avance es crucial para fortalecer la coordinación entre las empresas del sector y las autoridades públicas, combatiendo la informalidad y la competencia desleal.
Beneficios de una legislación uniforme
La implementación de esta ley traería beneficios significativos, no solo para el sector de la seguridad privada, sino también para la sociedad en general. Entre ellos destacan:
- Mejora en la calidad del servicio: Empresas capacitadas y certificadas ofrecerían mayor seguridad a los usuarios.
- Condiciones laborales dignas: Un marco regulatorio adecuado garantizaría derechos laborales para los empleados del sector.
- Fortalecimiento de la confianza ciudadana: Combatir la informalidad contribuiría a elevar la percepción de seguridad en el país.
Una inversión en seguridad para México
La seguridad privada es más que un simple servicio; es un pilar esencial para el bienestar social y el desarrollo económico. Su regulación adecuada no solo mejoraría la percepción de seguridad, sino que también atraería inversiones y consolidaría una colaboración efectiva con las fuerzas públicas.
México tiene la oportunidad de aprovechar el potencial del sector privado para construir un entorno más seguro y ordena