Sustento legal del Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad
El derecho humano al agua es un pilar fundamental para garantizar una vida digna y saludable para todos. En este contexto, el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad se erige como un acto de justicia social, buscando asegurar un acceso equitativo y sostenible al agua para todas las personas en México. Este esfuerzo tiene un sustento legal robusto, basado en la Ley de Aguas Nacionales, que regula la explotación, el uso y la distribución del agua en el país.
Marco legal y objetivos del Acuerdo
La Ley de Aguas Nacionales, administrada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), establece las directrices para la explotación, aprovechamiento y distribución del agua en México, con un enfoque en la sustentabilidad y la justicia social. El objetivo es garantizar un acceso equitativo a este recurso, esencial para la vida, mientras se protege el equilibrio ecológico y se promueve un desarrollo sustentable.
En este marco, el Gobierno de México ha impulsado un esfuerzo colectivo que involucra a las 32 entidades federativas, municipios, productores agrícolas e industriales, instituciones académicas y la sociedad civil. La colaboración de todos los sectores es clave para avanzar en la preservación del agua, un recurso que enfrenta crecientes desafíos debido a la sobreexplotación y el cambio climático.
Estrategias y medidas adoptadas
El Acuerdo Nacional no solo busca garantizar el acceso al agua, sino también promover prácticas más eficientes en su uso. Entre las medidas que se implementarán se destacan:
- Eficiencia en riego y procesos industriales: Se fomentará la adopción de tecnologías y métodos que permitan un uso más racional del agua en la agricultura y la industria.
- Reúso de agua tratada: Impulsar el reúso del agua tratada es una de las principales estrategias para asegurar un suministro constante de este recurso, especialmente en zonas con alta demanda.
- Recarga de acuíferos: Se promoverá la devolución de volúmenes de agua concesionados para recargar los acuíferos, garantizando así la disponibilidad futura del agua subterránea.
Estas acciones son esenciales para salvaguardar la seguridad alimentaria de México, un país cuya producción agrícola depende en gran medida de un manejo adecuado y sostenible del agua.
Un compromiso hacia la sustentabilidad
El Acuerdo Nacional refleja un compromiso integral con la sustentabilidad, en el que se busca no solo asegurar el acceso al agua para todas las personas, sino también preservar los ecosistemas acuáticos y garantizar el uso responsable del recurso en todos los sectores. Esta estrategia es fundamental para enfrentar los retos derivados del cambio climático y de la creciente demanda de agua en el país.
Con el apoyo de todos los actores involucrados, México puede avanzar hacia un modelo más justo y sustentable en la gestión del agua, asegurando que las futuras generaciones cuenten con este recurso esencial para una vida digna.