Exigen protocolos para prevenir acoso a mujeres en establecimientos comerciales
El Congreso local aprobó por unanimidad un llamado para que negocios y establecimientos públicos implementen protocolos que prevengan y atiendan casos de acoso hacia las mujeres en sus instalaciones.
La propuesta, impulsada por diputadas comprometidas con la equidad de género y la seguridad, busca garantizar espacios libres de violencia para las mujeres en Nuevo León. Según argumentaron las legisladoras, la medida responde a un aumento en los reportes de acoso en restaurantes, bares, centros comerciales y otros negocios, lo que ha generado preocupación en la sociedad y activado alarmas entre los defensores de derechos humanos.
Medidas urgentes y necesarias
El exhorto incluye la implementación de capacitaciones obligatorias para el personal, con el objetivo de que puedan identificar y actuar adecuadamente frente a casos de acoso. También se busca promover la instalación de sistemas de monitoreo, botones de pánico y áreas seguras dentro de los negocios, además de campañas de sensibilización para erradicar la normalización de estas conductas.
“La seguridad de las mujeres debe ser una prioridad en cualquier lugar. Este llamado busca que los espacios públicos y privados tomen su responsabilidad en serio y adopten medidas que protejan a sus clientas y trabajadoras”, declaró una de las diputadas durante la sesión.
Respaldo del sector privado
Algunos empresarios locales ya han mostrado interés en adherirse a estas iniciativas, conscientes de que garantizar la seguridad de sus clientas también es un factor clave para mantener la confianza y el éxito de sus negocios.
Sin embargo, otros han señalado que la implementación de protocolos podría representar un reto financiero, especialmente para negocios pequeños. Ante esto, las diputadas han propuesto que el gobierno estatal colabore con incentivos o apoyos para que las medidas puedan adoptarse de forma más accesible.
Compromiso legislativo
La aprobación de este exhorto representa un avance en la construcción de un entorno más seguro para las mujeres en Nuevo León. Aunque no tiene carácter vinculante, las diputadas confían en que el sector privado responda positivamente al llamado y que, de ser necesario, se trabajará en una legislación que haga obligatorios estos protocolos.
Este paso es un recordatorio del compromiso social con la equidad y la protección de las mujeres, un esfuerzo colectivo que involucra tanto al sector público como al privado para construir un estado más seguro para todos.