El Salvador autoriza minería metálica tras siete años de prohibición

diciembre 24, 2024

El Congreso de El Salvador aprobó una nueva ley que permite la minería metálica, marcando el fin de una prohibición vigente desde 2017. La legislación fue respaldada por 57 de los 60 diputados, incluyendo la mayoría oficialista del partido Nuevas Ideas y sus aliados, en respuesta a una propuesta impulsada por el presidente Nayib Bukele.

La nueva normativa habilita la exploración, explotación, extracción y procesamiento de recursos metálicos tanto en el suelo como en el subsuelo, incluso en áreas marítimas del territorio salvadoreño. Además, estipula que el Estado será el único autorizado para llevar a cabo actividades mineras, eliminando concesiones, licencias o permisos para particulares.

Durante la sesión, Elisa Rosales, diputada de Nuevas Ideas, defendió la medida argumentando que «esta actividad va a generar empleos, desarrollo y recursos para invertir en políticas públicas». Asimismo, la ley prohíbe el uso de mercurio y busca excluir ciertas zonas de la actividad minera, como áreas forestales, reservas naturales, zonas de recarga hídrica y regiones urbanas.

El potencial económico de la minería
Según estudios mencionados por el presidente Bukele, en tan solo el 4% de las áreas potenciales de minería en el país se identificaron 50 millones de onzas de oro, con un valor estimado de 131,000 millones de dólares, equivalentes al 380% del Producto Interno Bruto (PIB) de El Salvador. Bukele también aseguró que el potencial total podría superar los 3 billones de dólares, lo que representaría más del 8,800% del PIB nacional.

Críticas y preocupaciones ambientales
A pesar de los argumentos económicos, la aprobación de la ley ha generado rechazo entre grupos ambientalistas y sectores de la población. El lunes, decenas de personas se manifestaron frente al Congreso en contra de la normativa.

Luis González, un destacado activista ambiental, advirtió sobre los riesgos ecológicos que implicaría la reactivación de la minería metálica en el país. «El nivel de contaminación en el agua, el suelo y la biodiversidad es inadmisible para la vida como la conocemos», afirmó González, señalando que estudios técnicos y científicos han demostrado que esta actividad es inviable en el contexto salvadoreño.

El Salvador, el país más pequeño de Centroamérica, enfrenta una compleja disyuntiva entre los posibles beneficios económicos de la minería y los riesgos que esta actividad podría representar para el medio ambiente y las comunidades locales.